GARABATO : un GRAN JUEGO de 15 años (I Parte)

y sus ojos estirados
llegaban a la boca
casi compartiendo
el suelo.
Ángel Amaro

Por: Ángel Rafael Rondón

De pequeño, como volaba papagayos es lo que más recuerdo – Échale, échale... mosca que te lo cortan, recógelo... recógelo, decían mis amigos agitados, viendo aquel punto negro en el aire que se perdía entre el firmamento ante tan gran estrella que doraba todo nuestro cuerpo. Solo sabía que estaba allí por la delgada fibra de lana que tasajeaba con su prensor mis manos.

Quizás él, digo el papagayo, ese que yo volaba, trajo del más allá, de lo lejos, eso que llaman Teatro. Es que cuando yo recogía la cabuya de aquella cometa sentía que traía consigo los poemas de Neruda, al ruiseñor de Aquiles, el enano curioso de los Hermanos Grimm, Una bota rota de Charles Penault, la estrella del Principito, un mago llamado OZ y a Momo, sí a Momo pero sin sus hombres grises; tantos, tantos que se escaparon y se escondieron en esas guaridas nocturnas que noche tras noche despertábamos cuando entonábamos el canto de los números: Uno, dos, tres, cuatro,... ya ... ya ... te encontré ahora cuentas tú, cuando jugábamos a las escondidas. Miro atrás y mi vida se ha convertido en un gran juego: pise, la ere, matagarrado, policías y ladrones, charadas, cuentos de terror, mímicas, tortas de barro y cualquier cosa que se nos pareciera al juego lo aceptamos para aprovechar aquel tiempo que marchaba sin paradas y con prisa. Han pasado 15 años ya tengo 15 años con un juguete inquieto y travieso, gracioso, bonachón, llamado GARABATO, juguete mágico lleno de cuentos, bailes, música. A cuántos ha cautivado GARABATO con su risa , con su encanto, a cuántos ha hecho felices.

En estos 15 años al lado de GARABATO todos nosotros, pequeños y grandes, aprendimos a soñar, a darle valor al tiempo, a escribir la rabia sobre el hielo y esperar a que salga el sol y se la lleve, la derrita, lo maravilloso de tener amigos y amigas, actores y actrices, a ver crecer nuestros hijos, a devolvernos por el camino que canturreábamos cuando éramos niños – aun lo somos – volvemos a subir al coco cura, a donde jugábamos con los papagayos, subimos jugando y bajamos jugando.

Ahora seguimos volando papagayos en un escenario de multitud de colores y es el público quien agita con prisa sus manos, nos aplaude. Dentro de nosotros vive un niño grande y seguimos jugando, y ese juguete que nos anima a jugar se llama GARABATO.

Bienvenido a sus 15 años, hoy 29 de Enero del 2005. Cantemos juntos el Cumpleaños.

2 comentarios

[miguelangel anmisaday - 25 de enero de 2005 - 17:22]

que bella es esta revista sigan asi. Aproposito felicitaciones a la gente linda de garabato por su trabajo especial y regular

[Eddy Díaz Souza - 24 de enero de 2005 - 14:19]

Mis más sinceras felicitaciones a ti Ángel Rafael, a esos jóvenes GARABATOS que te acompañan y a todos los que han contribuido en este espigamiento del teatro para niños en Aragua. ¡Muchas Felicidades GARABATO!